Heliópolis, una honrosa excepción

Heliópolis, una honrosa excepción
- A. T.
Aitor TorviscoAitor Torvisco 7 min lectura
El Betis y su pujante cantera, cuidada con mimo por el club y tutelada en la elite por un Quique Setién sin complejos, se han convertido en la honrosa excepción de los clubes del Viejo Continente. Según un análisis del Centro Internacional para Estudios del Deporte (CIES), los equipos de fútbol europeos han dicho adiós sin ambages a los jugadores de la casa, que sólo representan el 16,9% de sus plantillas, cifra que marca un mínimo histórico, según el citado dossier.

De manera paralela, y como consecuencia de ello, es mayor que nunca el porcentaje de extranjeros, un 41,5%, de acuerdo con los datos recabados por el Observatorio del Fútbol en un estudio denominado ‘Diez años de análisis demográfico del mercado de futbolistas en Europa’. España presenta un 17,8% de canteranos y un 38,6% de foráneos, a 1 de octubre de 2018.

El Betis, sin embargo, dobla las cifras europeas y españolas, ya que uno de cada tres futbolistas verdiblancos se ha formado en las instalaciones de la Ciudad Deportiva Luis del Sol. Cinco de las 21 fichas del primer equipo son ocupadas por canteranos: Francis Guerrero, Junior Firpo, Loren Morón y esos dos hijos pródigos que regresaron a casa, Joaquín Sánchez y Sergio León. El porcentaje asciende al 33,3%, ocho de un total de 24, si se tienen en cuenta todos los efectivos utilizados por Quique Setién en lo que va de temporada. Es decir, contando a Kaptoum, Edgar y Robert, la nueva ‘perla’ de Heliópolis. Además, resulta bastante probable que la cifra aumente más según vaya avanzando el curso, pues Dani Rebollo es el tercer portero y un asiduo en todos los desplazamientos del primer equipo y también ha sido citado en una ocasión (sin debutar) Diego Altamirano.

De hecho, la pasada campaña, Setién ya contó con los propios Joaquín, Sergio León, Francis, Junior y Loren, además de con Fabián Ruiz, Rafa Navarro, Julio Gracia, Juanjo Narváez, Pedro López, Carlos Redruello ‘Redru’ y Aitor Ruibal. En total, 12 de los 30 que tuvieron minutos entre LaLiga y el testimonial papel del Betis en la Copa del Rey; es decir, un asombroso 40 por ciento.

Por abajo
La citada investigación se estructura en torno a tres grandes áreas: formación, migración y movilidad, con una amplia muestra de los equipos de las 31 principales Ligas europeas entre 2009 y 2018. Según este informe, la proporción de jugadores que pasaron al menos tres temporadas en el mismo club cuando tenían entre los 15 y los 21 años “nunca ha sido tan baja” como lo era el último 1 de octubre: un 16,9% de las plantillas, porcentaje inferior en un 6,3% al de hace una década (23,4%).

El descenso del último año es, además, el mayor jamás registrado, un -1,6%, y es común a todas las áreas del continente europeo. Con todo, Europa del norte (países nórdicos) y la central (Alemania, Croacia, República Checa, Hungría...), con 21,9 y 20,6% respectivamente, son las zonas con una mayor proporción de jugadores de cantera, seguidas por Europa del Este (Rusia, Ucrania...), con un 16,6%; Europa Occidental (Inglaterra, Francia, Holanda...), con el 15,7%; y Europa del Sur (España, Portugal, Italia, Grecia), con el 12,8%. El estudio refleja asimismo la “concentración precoz de talentos en un selecto grupo de clubes dominantes”: los jugadores aún en etapa de formación que juegan en un club distinto a aquél en el que empezaron se ha elevado en una década del 40,5% al 53,9 por ciento. Excepto en Chipre, con un crecimiento mínimo de 0,1%, todas las Ligas del Viejo Continente perdieron canteranos. En términos absolutos, Israel, con un 28% de ellos en sus clubes, e Italia, con un 7,4 por ciento, son los que marcan los extremos. España está en el punto medio de la tabla, con ese 17,8%.

El análisis del CIES recoge también que, en la última década, la proporción de expatriados que juegan en las Ligas europeas se ha incrementado hasta una proporción también inédita del 41,5%, frente al 34,7% de 2009. Se entiende por ‘expatriado’ al jugador que creció fuera del país de su actual club y que abandonó su país por motivos relacionados con el fútbol. En este índice, las Ligas del sur (51,8%) y las del este (48,9%) se llevan la mayor parte. Por países, Chipre (66,2%) y Serbia (16,3%) abren y cierran la tabla. España presenta un porcentaje del 38,6%, en el decimoquinto puesto de mayor a menor.

En cuanto a la movilidad, o cambio de club respecto a la temporada anterior, en 2018, el 44,4 % de los jugadores estrenó equipo. En 2017 fue un 45%, pero en 2009 sólo un 36,7%. Gana Europa del Este (50,9%), aunque, por países, lidera Chipre (60,4%), y cierran por zonas las Ligas nórdicas (38,4%) y por países Alemania, con un 32,1% de nuevos jugadores respecto al año anterior. El estudio concluye que estas cifras denotan que “un número creciente de jugadores considera su equipo un mero trampolín hacia mercados más lucrativos”. Los propietarios de los clubes, por su parte, “tienden a optimizar el retorno financiero en detrimento de otras consideraciones deportivas. La creciente inestabilidad que resulta de ello limita la competitividad de cada vez más equipos, para beneficio de los más ricos y mejor estructurados”, añade.