Obsesión en el Betis por atinar con el mediocentro

El Betis se está moviendo como pez en el agua en el primer semestre de 2018, especialmente tras el cierre de la ventana invernal (cuando se anticipó la llegada de un baluarte defensivo como Bartra, aprovechando una impagable oportunidad de mercado) y antes de que se abra la estival. Como quiera que varios objetivos interesantes quedan libres el próximo 30 de junio, Serra Ferrer ha acelerado para adelantarse a la competencia por algunos de ellos, consiguiéndolo con el portero Pau López y el extremo Takashi Inui, al tiempo que está redoblando los esfuerzos para atar al interior Sergio Canales y el central Iván Marcano, con lo que se aseguraría una columna vertebral nueva a coste prácticamente cero (pese a tener que abonarles primas de fichaje, sus llegadas siempre serían más caras debiendo afrontar un traspaso).

De forma paralela, con la segura recepción en breve de diez millones de euros de la Fiorentina por Pezzella, ya que la entidad viola ha comunicado a los verdiblancos que ejercerá la opción de compra, la secretaría técnica echa cuentas para determinar, teniendo en cuenta los nuevos listones salariales fijados por LaLiga a razón del incremento presupuestario y en número de socios, las audiencias de televisión y otros conceptos, de cuánto será la partida para completar la plantilla 2018/2019.

Como ya quedó referido en estas páginas, los técnicos han consensuado que la clave reside en la contratación de un pivote de garantías que compita con Javi García, pues el '5' es la piedra filosofal del 'estilo Setién'. Es por ello que no se reparará en gastos para cubrir esa posición, habida cuenta de que existe la tranquilidad de tener las espaldas cubiertas en otras demarcaciones. Según ha podido saber ESTADIO Deportivo, la encomienda a los responsables de la planificación en Heliópolis raya la obsesión, por lo que se están barajando un buen número de alternativas para el eje de la medular, pues la idea del míster cántabro es volver a su predilecto 1-4-1-4-1, aunque ha comprobado que el dibujo con tres centrales ha calado en el vestuario y genera un interesante equilibrio en el Betis, que ha depurado el giro táctico hasta sacarle un gran rédito, por lo que será una variante para tener muy en cuenta.

No hay prisas en este apartado, como sí está existiendo para cerrar a aquéllos que quedan libres, haciéndose la idea la comisión ejecutiva que deberá invertir una cantidad reseñable para contratar a este medio de cierre posicional que marque diferencias. Como se desveló en estas mismas páginas, uno de los que más gusta es el noruego Sander Berge (20), que está saliendo de una lesión de larga duración, lo que no ha rebajado las pretensiones del Genk belga, que no baja de 15 millones de euros.

En este contexto surgió la semana pasada en Argentina y Colombia la opción del 'cafetero' Wilmar Barrios (24), a quien Boca Juniors, que ya conoció el pasado mes de enero el interés bético, pretende blindar, elevando su cláusula de los 16 millones de dólares actuales a 30. Además, en Madrid dan por hecho que Marcos Llorente (23) saldrá el próximo verano del Real Madrid, una vez comprobado que Zidane no cuenta con él, por lo que Serra se pondrá a la larguísima cola de aspirantes a un traspaso con opción de recompra. Al parecer, Real Sociedad y Eintracht tendrían ventaja. En este último club milita otro pretendido, Omar Mascarell (25), aparentemente restablecido de una lesión en el tendón de Aquiles que, eso sí, genera dudas.

No son, ni mucho menos, los únicos. Este periódico ha podido contrastar que se sigue de cerca la evolución en Alemania de la operación de tobillo del ex malaguista Ignacio Camacho (27), lastrado en su estreno como pivote del Wolfsburgo, mientras que se hace lo propio con sus homólogos Oriol Romeu (26), fijo en el Southampton, y Giannelli Imbula (25), que vuelve al Stoke City de su productiva cesión en el Toulouse. Igualmente, interesa el serbio Nemanja Radoja (25), por el que se ha abierto una línea de diálogo con un Celta que pretende a Camarasa.