El ajustado presupuesto verdiblanco, condicionado además por los límites del 'fair play' financiero, ha llevado al
Betis a buscar fórmulas imaginativas con las que hacer frente al costoso traspaso del central catalán, el más caro de la era Serra y el segundo más caro de la historia del
Betis, sólo superado por el de
Denilson e igualado con el de
Sergio García y
Finidi.
En este sentido, el
Betis abonará en varios plazos el fichaje del ex del
F.C. Barcelona. Ahora ingresará en las arcas del
BVB unos
dos millones de euros y el resto hasta los
diez en los que ha sido fijado el traspaso del polivalente zaguero en dos plazos que vencerán este verano y el siguiente.
La intención del cuadro heliopolitano es pagar esas cantidades con el dinero que ingrese por la venta al
Genoa del central argentino
Germán Pezzella, cuya opción de compra está valorada en once millones de euros.
Una jugada maestra que permitirá al
Betis contar con un defensa nivel 'top' que, además, ha rebajado considerablemente su ficha para jugar en el
Betis, que le ha querido compensar ese esfuerzo con un contrato de larga duración, que le unirá a la entidad heliopolitana hasta 2023.
Ya para el año que viene, el
Betis debe decidir si ejecuta la opción de compra por Amat que, de momento, no está nada claro. Teniendo en cuenta que dejarán de pertenecer
Pezzella y
Tosca, el
Betis tendría en nómina a
Bartra,
Mandi y
Feddal, amén de un cuarto central que buscaría Serra en el próximo mercado invernal. Como ya viene informando este diario desde hace semanas, al poblero le gustan los 'portistas'
Diego Reyes y
Marcano.