Desde su fichaje por el Betis,
Antonio Adán viene siendo medio equipo con sus paradas (el otro medio han sido los goles de Rubén Castro). Tan determinante ha sido el de Mejorada del Campo, que a
Dani Giménez apenas le han quedado oportunidades para demostrar una solvencia que ha exhibido en partidos de
Copa del Rey y en los choques ligueros que su compañero se perdió por sanción.
La valía de los dos metas que el
Betis tiene en nómina está fuera de toda duda; pero, además, son dos referentes para la plantilla y los líderes de un vestuario en el que nadie lleva más tiempo que ellos.
No en vano, en el conjunto verdiblanco ya no queda ninguno de los miembros del equipo al que
Adán se sumó en
enero de 2014, cuando llegó procedente del
Cagliari italiano. Los últimos supervivientes del equipo del último descenso bético eran
Rubén Castro y
Dani Ceballos, que se marcharon este mismo verano a China y a Madrid.
Así las cosas, después del que fuera canterano madridista, el que más tiempo lleva en el Betis es su compañero
Dani Giménez, que llegó a La Palmera en el verano de ese mismo 2014.
Es decir, que mañana el madrileño iniciará su
quinta temporada como verdiblanco y el vigués comenzará la
cuarta suya. Nadie les ha regalado nada, pues en este tiempo han pasado por el banquillo del
Benito Villamarín un total de nueve entrenadores distintos y todos han contado con ellos. El último, un
Quique Setién que ayer aprovechó una pregunta sobre el futuro de
Adán para elogiarles a ambos.
"A mí, de momento, no me consta. No tengo noticia de que Adán vaya a salir. Ni se ha planteado. Estamos muy contentos con Adán y con Dani, creo que los dos están haciendo un trabajo que es extraordinario y que aportan al equipo lo que les estamos pidiendo, que no es fácil. Tienen una actitud extraordinaria para tratar de mejorar el juego con el pie. En principio, no lo contemplo, no sé si en última instancia puede suceder algo con él o con cualquier otro, pero no tengo ninguna noticia de que puedan salir", manifestó Setién.