Mario Pasalic es, por ahora, la gran decepción de Serra Ferrer, que había conseguido el compromiso del centrocampista para ser bético, presionando hasta última hora al Chelsea.
Finalmente, el cuadro londinense impuso su marcha como cedido al CSKA de Moscú, dada la amistad de sus dueños (Roman Abramovich y Leonid Fedún) y sus entrenadores (Antonio Conte y Massimo Carrera), amén de que era el único club que asumía su ficha íntegra, cifrada en 2,5 millones de euros netos tras su ampliación de contrato hasta 2021.
“Mario tiene mucha simpatía por Serra Ferrer, que ha sido un caballero en las negociaciones y, como prometió, el Betis lo ha intentado hasta el final, pero era difícil; fueron muy correctos”, se excusaba su agente, Marko Naletilic, en declaraciones a ED.
El intento final del Betis, que ofrecía 4,5 millones de euros por el 50% del pase, cayó en saco roto, pues los 'Blues' no lo sueltan.