La paciencia y la astucia a la hora de jugar sus cartas están empezando a dar réditos al
Betis en su deseo de hacerse con los servicios de
Mario Pasalic, marcada como la
'opción A' para reforzar la medular de
Setién, que hace escasas horas parecía esfumarse y que a día de hoy está más cerca que nunca.
Según ha podido saber ESTADIO Deportivo, la posibilidad de que el mediocentro germano-croata recale en
la Lazio está totalmente descartada y en las últimas horas
Serra Ferrer ha avanzado notablemente en las negociaciones con el
Chelsea y con el agente de
Pasalic para cerrar una cesión con opción de compra.
Fuentes de la negociación admiten que hay
buena sintonía y optimismo entre las partes. No obstante, también remarcan que para
cerrar la operación hay que sortear varios obstáculos. Estos, principalmente son
económicos. Es caro. Cabe recordar que en Italia se venía hablando de un millón por la cesión al conjunto romano y 10 más para quedárselo en propiedad.
El ruido mediático en el país transalpino con esta negociación con la
Lazio le ha venido que ni pintado a
Serra, que al abrigo de
interesantes ofrecimientos como el del chileno Marcelo Díaz -el balear ha reconocido que le "gusta mucho"-, ha podido ir avanzando con paciencia y sigilo en las complicadísimas negociaciones por
Pasalic.
La
Lazio (que reaccionó fichando al brasileño
Lucas Leiva) ya no es competencia, pero hay muchos clubes interesados en el internacional croata, de sólo 22 años y 1,88 metros. El
Spartak de Moscú ruso, especialmente.
El
Betis está muy bien posicionado, pero debe apostar de verdad y aprovechar que a
Pasalic, como viene contando este periódico, le atrae la idea de volver a
España, donde jugó en la 14/15 con el
Elche, la primera de sus tres cesiones. En la 15/16 lo hizo en la
Ligue 1 con el
Mónaco y el pasado curso adquirió también experiencia en la Serie A, defendiendo la camiseta del
Milan.
Antes de salir cedido, el jugador debería firmar la opción que el
Chelsea tiene para ampliar un año el contrato de
Pasalic, en vigor hasta el 30 de junio de 2018.
Aitor Torvisco3 min lectura