Zozulya, dispuesto a cumplir su contrato

Zozulya, dispuesto a cumplir su contrato
A Roman Zozulya le gustaría hacer la pretemporada y tener la oportunidad de convencer a Quique Setién. - Aitor Torvisco
Aitor TorviscoAitor Torvisco 3 min lectura
El Betis sabe que no será fácil dar salida a algunos jugadores que no entran en los planes de Setién y cuyas salidas se antojan vitales para poder seguir avanzando en los fichajes. El presidente, Ángel Haro, admitió públicamente que el club "tiene urgencias con dos o tres jugadores, como Zozulya o Digard, a los que ya se les ha dicho que no cuentan".

Sin embargo, darles salida no va a ser nada sencillo. Es más, lo de Roman Zozulya y el Betis es una pesadilla que no tiene fin. Cabe recordar que el ucraniano está sin competir desde enero, tras frustrarse su cesión al Rayo por presiones de la afición vallecana y quedarse sin ficha en el conjunto verdiblanco; algo que ha supuesto además que ahora otros clubes no se atrevan a ficharle por miedo a las consecuencias.

Sin ofertas sobre su mesa, se siente víctima de algo que él no ha provocado y, según ha podido saber ESTADIO, está dispuesto a cumplir los dos años de contrato que le restan por cumplir con el Betis. Es más, su idea a día de hoy es realizar la pretemporada como uno más y tratar de convencer a Quique Setién de que puede tener un sitio en la plantilla verdiblanca; un plan opuesto al que tienen con él en el club. Es decir, que la única solución que se antoja viable es pactar la rescisión de contrato de Zozulya, lo que lógicamente conllevaría un notable gasto que los rectores del Betis quieren evitar a toda costa.

Los representantes del internacional ucraniano han trabajado los últimos meses en encontrar un equipo, pero todo han sido obstáculos.

La mejor opción era la de regresar al Dnipro, pero el club ucraniano estaba sancionado sin poder fichar después de ser denunciado por impagos y le fue denegado el permiso especial que pidió, argumentando la "situación especial" que estaba viviendo Zozulya.

Ahora, esa puerta está más cerrada que nunca, pues esos impagos le han costado un descenso a la tercera de Ucrania y amenaza con provocar su desaparición. Tampoco está abierta ya la puerta del New York Cosmos de EE.UU., que negoció durante semanas y que renunció finalmente a su fichaje, ante las trabas que puso el Betis a la operación.