El
Betis tiene muy claros sus objetivos prioritarios para la próxima temporada, pero para acceder a ellos está teniendo que hacer encaje de bolillos. Los rectores tratan de regatear a los clubes vendedores, ya que todo lo que se ahorren en los traspasos le permitirá ofrecer unas mejores condiciones a los futbolistas deseados. Este sería justo el caso del culé
Cristian Tello, con cuyo agente,
José María Orobitg, hay prevista una reunión clave para mañana, en la que el
Betis espera encarrilar su llegada, después de un acercamiento de posturas con el
Barcelona que obligaría a renegociar el principio de acuerdo al que
Lorenzo Serra Ferrer había llegado con el extremo.
El vicepresidente deportivo bético se reunió el pasado martes en la Ciudad Condal con el representante de
Tello y con un alto ejecutivo culé, transmitió sus posibilidades económicas y conoció lo que pedía
Tello, algo que podía cuadrarse con un contrato de larga duración.
A partir de ahí se han producido conversaciones para tratar de contentar al
Barcelona, que exige entre 10 y 12 kilos por un jugador con 15 millones de cláusula pero con sólo un año más de contrato. El
Betis ya sabe que deberá gastar más de los cinco o seis millones que preveían por la mitad del pase, lo que le obligaría a pedir un esfuerzo a
Tello, para que ajuste algo a la baja los ingresos que ya daba por hechos. Esta situación, según transmiten a ED desde el entorno del jugador, supone un leve contratiempo; sobre todo, teniendo en cuenta que el
Valencia y el
Zenit también están apostando fuerte por su fichaje.
No obstante, las partes ven reconducible la operación y con esta buena predisposición se verán las caras mañana.