Manuel Ruiz de Lopera llegó ayer relajado, sonriente y "tranquilo" a la
Sección Tercera de la Audiencia de Sevilla, donde se celebró la segunda jornada del juicio del 'caso Betis', en medio de una enorme expectación mediática.
La defensa de
Lopera elevó un escrito en el que solicita que se reclame al
Betis la escritura notarial elevada tras el reciente acuerdo entre el club y 'Bitton Sport', que a su jucio avala la venta de acciones de
Farusa, y que cite a declarar como testigo al presidente del
Betis,
Ángel Haro. Tanto la Fiscalía como las acusaciones que ejercen las asociaciones de béticos se han opuesto a la práctica de esta prueba al considerar que son "extemporáneas".
La Sección Tercera de la Audiencia se pronunciará en las próximas fechas sobre las cuestiones previas y las pruebas solicitadas en el juicio, que continuará el próximo 5 de junio con la declaración del propio
Lopera.
Cabe recordar que la abogada del empresario de El Fontanal solicitó la libre absolución de su cliente porque "no ha existido disposición, apropiación ni apoderamiento de fondos" del club, "ni se ha producido enriquecimiento o beneficio alguno" para él y para su entorno familiar.
Frente a ello, la Fiscalía solicita para el expresidente del
Betis tres años de cárcel por un presunto delito continuado de apropiación indebida en su gestión del club, mientras que también le pide pagar una multa de 2.700 euros y abonar una indemnización de un total de 3,6 millones de euros. De forma alternativa, el tribunal sopesará condenarlo a dos años de prisión por un delito continuado de administración desleal.