Lorenzo Reyes, flamante fichaje verdiblanco, ha hablado en la página oficial del club en una amplia conversación en la que se ha querido dar a conocer los inicios y la personalidad del chileno. A continuación, la transcripción del reportaje:
Daba igual el partido. Su relevancia, su envergadura. No importaba el rival. El comportamiento dentro del terreno de juego siempre se regía por las mismas pautas, por una forma específica de alcanzar el éxito. Y los narradores chilenos, pasionales en su cometido, sabían relatar el guión de cada encuentro. "Siempre Reyes" empezó a convertirse en una muletilla habitual, una frase constante cada vez que el nuevo jugador verdiblanco atrapaba el esférico para iniciar la construcción del ataque para su querido CD Huachipato, club en el que durante cuatro años ha sido el gestor, el motor necesario para hallar el equilibrio indispensable entre los parámetros defensivos y vanguardistas que requiere la victoria.
Natural de Santiago de Chile, Lorenzo Reyes tuvo claro desde muy pequeño la dirección del oficio que iba a desarrollar para el resto de su vida: “Desde que tengo memoria me ha gustado mucho el fútbol. Siempre soñé con ser futbolista profesional. Es una enorme alegría progresar y seguir por esta senda. Empecé a los tres años a dar patadas al balón y me sigue gustando con la misma pasión con la que arranqué desde pequeño”.
La figura del progenitor pronto se convirtió para Lorenzo en una guía, un faro al que agarrarse en los malos momentos, pero sobre todo, un espejo en el que reflejarse para ese aprendizaje que no había hecho más que arrancar: "Veía mucho fútbol,principalmente por mi padre, siempre lo iba a ver jugar al fútbol a cada apartido. Fue mi inspiración a seguir. Llegó a ser profesional, disputando algunos partidos, pero cuando conoció a mi madre y encontró el amor, volvió al sur. Tuvo que dejar el fútbol pronto, pero su apoyo siempre ha sido fundamental para mi carrera".
Si hay algo que marca la carrera deportiva de este mediocentro es, sin lugar a dudas, su precocidad. En marzo de 2009, con tan solo 18 años, debuta en el campeonato chileno ante Universidad Católica, para luego coronarse campeón del Clausura 2012, erigiéndose en baluarte principal del CD Huachipato. Las mismas ganas de quemar etapas futbolísticas le llevaron a debutar con la selección absoluta de Chile en diciembre de 2011 en un partido frente a Paraguay.
Los más de 500 kilómetros que separan Santiago, su ciudad natal, y Talcahuano, lugar de residencia del CD Huachipato, fueron una piedra muy pesada para Lorenzo Reyes en la evolución del sueño que perseguía, la dedicación al balompié: "Cuando me fui a Talcahuano, me costó mucho. Al principio lo pasé mal porque tengo mucho apego a mi familia, todo los que están cerca. Me costó, pero luché por mi sueño y tuve que conseguirlo. Siempre fue importante para mí el apoyo de mi novia, vivía conmigo y aquí en Sevilla también lo hará".
Los primeros pasos en el panorama futbolístico los iba a dar Lorenzo Reyes como mediocentro defensivo, rol que perdura en la actualidad y en el que espera congratular a los béticos en esta experiencia europea que se abre en su carrera: "Siempre he jugado en esa posición, por lo que no soy muy goleador. Tenía que hacer el trabajo de destrucción y no me iba mucho al ataque, pero es algo que me gusta. Sé que si hago un gol con la camiseta del Betis, me voy a volver loco, ya he pensado en ello".
La emoción es absorbida en las palabras de 'Lolo' Reyes cuando debe analizar su progresión futbolística: "Jugaba por el colegio Liceo en la Selección, anduve bien y me invitaron a probar. A los 16 llegué a las categorías inferiores de Huachipato y quedé campeón ese año con el equipo sub-17. El técnico de prime equipo me vio y me llamó a hacer la temporada con los mayores. Mi carrera comenzó en el Atlético Valdés. Todas las plazas donde he jugado han sido muy importantes para mí, para que ahora pueda triunfar en Europa". Más tarde, apareció el Real Betis, un peldaño a superar en la meteórica proyección del mediocentro chileno: "A largo plazo, quiero estar en la selección, es lo que siempre he soñado, se me abrieron las puertas en Europa y así podré ir con más constancia. Mi sueño es regalar algo, dejar una huella en este club tan histórico como el Betis".
El miedo, ese elemento consustancial a las decisiones arriesgadas, no conjuga bien en el diccionario valiente de Lorenzo Reyes: "Es la decisión más valiente de mi vida, por todo lo que influye en mi vida, estuve esperando mucho tiempo para jugar en Santiago, y como se ha dado esta oportunidad, tomé una decisión valiente. Hubiese sido más fácil jugar en Santiago, pero quería venir al Betis. No tengo ningún tipo de miedo ante esta responsabilidad, solo muchas ganas. Tengo que estar a la altura y responder de muy buena manera ante la afición".
Apacible y reservado, el cine se convierte en el mejor refugio de Reyes cuando quiere evadirse del fútbol y todos los componentes de presión mediática que lleva aparejados: "Soy mucho de ver películas, en la casa o en el cine, estar con mi novia y descansar. Me gusta salir a pasear a veces, ella es de Santiago, me acompañó a todos los lados y yo hago lo mismo con ella". Hermético cuando se le cuestiona sobre una posible definición para su carácter, la fama no es una preocupación para el centrocampista sudamericano: "No me voy a dar ninguna referencia sobre mí mismo, tienen que conocerme. La fama la llevo bien, no es por tirarme cualidades yo mismo, pero soy muy sencillo. Acá hay mucha más prensa que en Huachipato, tengo que mantenerme con la cabeza fría y el corazón caliente".
La madurez de Lorenzo Reyes, impropia a sus 22 años, sale a relucir cuando se le interpela acerca de la capitanía que ostentaba en el CD Huachipato: "No me gusta hablar mucho de mí, pero soy una persona madura, siempre es bueno dar ejemplo, no porque esté pensando ahora sí está bien una cosa y luego no, me comporto siempre igual y espero aportar lo mismo, esa madurez en el Betis”. Y como instructor principal en las filas negriazules, los momentos más especiales son rememorados: "Lo mejor que me ha pasado hasta el momento es salir campeón con ese club, me dio la oportunidad de mejorar como futbolista y como persona. Me tocó ser capitán del equipo y levantar la copa. Fue todo muy lindo".
'Lolo' como es conocido desde que era joven en Chile por su familia, sus amigos y sus compañeros, se deshace en elogios para los futbolistas que han marcado su admiración por el fútbol, ese modelo de jugador al que siempre ha profesado devoción: "No hay quizás un chileno entre mis referencias, de chico me ha gustado el fútbol, veo todo el día fútbol y me gustan muchos futbolistas. Sin duda, mi ídolo ha sido Ronaldinho. Para mí fue un partido muy especial cuando me enfrenté a él defendiendo la camiseta de Chile, me tocó enfrentarme a mi ídolo, cambié camisetas con él y tuve la suerte de que no hiciera un buen partido".
La humildad impregna la dicción de Lorenzo Reyes, consciente del duro sacrificio y el tesón manifestados en su currículo para poder llegar al más alto nivel profesional: "No soy de prometer nada, sólo voy a hacer todo lo posible por dejar huella, aportar mucho al equipo, conocer a todos los compñeros, al cuerpo técnico, vamos a hacerlo lo mejor posible. Fue una temporada muy buena para ellos. La idea es crecer, tenemos que sacar el sexto ates que el séptimo, o el quinto o el cuarto, siempre más alto que en los lugares en los que acabemos cada temporada".
En un país duramente salpicado por la represión política, el desempleo y la pobreza aún se hacen notar en Chile, con efectos devastadores en el fútbol. Empero, el deporte rey se recupera paulatinamente en un país que desea aparcar la zozobra que tiempo atrás tocó expermentar. Curiosamente, la región de del Biobío, ubicación del CD Huachipato, es una de las zonas con menor índice de emigración existentes en el país chileno, circunstancia que no ha sido óbice para que Lorenzo Reyes diese el gran salto: "El campeonato chileno ha ido creciendo mucho gracias a los valores que sacan de sus canteras, futbolistas muy jóvenes. Desde que llegó Bielsa a la selección ha crecido mucho, le tienen mucho respeto. Los que juegan en el extranjero le dan un toque especial, pero aun así los jóvenes se ven obligados a salir para poder mejorar como futbolistas y encontrar una mayor estabilidad económica fuera del país. La liga española es la mejor del mundo. En lo personal, siempre soñé con jugar acá, no pensaba que se iba a cumplir tan deprisa. Muy contento por llegar a una competición tan linda. Además, la selección española es la mejor del mundo".
Talcahuano, ciudad en la que vivido sus mejores años como futbolista, posee una economía basada principalmente en la industria y la pesca, con uno de los puertos más importantes del país. Buques diferentes son el Real Betis y el CD Huachipato, aunque también con ciertas similitudes: "La verdad es que por compararlo, y guardando las proporciones, Huachipato es un poco parecido al Betis, con menos afición, pero igual de fieles ambas hinchadas. Ambos no son de los clubes más poderosos económicamente en sus ligas. Vi ya donde entrenaremos, la ciudad deportiva, que es más grande y tiene más canchas. Me imagino lo que debe ser con toda la afición, con todo el estadio lleno, jugar en el Benito Villamarín".
Con un duelo tan enraizado en las costumbres y en la rutina sevillana como es el Betis-Sevilla, Lorenzo Reyes ya había oído hablar de este envite antes de su llegada a la capital hispalense: "Antes de presentarme, me dijeron hay que ganar el clásico, es una liga aparte. Tenemos que jugarlo y ganarlo. Debe ser bonito".
Lorenzo Reyes ya sabe el lugar elegido para la disputa de la próxima edición de la Europa League: Turín, emplazamiento donde Arturo Vidal protagoniza actuaciones majestuosas en el bloque del a Juventus. "Espero llegar lo más lejos posible, llego a un equipo que tiene mucha hambre, es un equipo joven, con alguna experiencia y quiero ayudar mucho. Vidal es el mejor futbolista chileno en estos momentos. Espero llegar a Turín, donde será la final de la Europa League esta temporada y visitar todos esas grandes ciudades donde tengamos la oportunidad de jugar".
Y es que hablando de elecciones y de instantes seleccionados, Gabriela Mistral, escritora chilena ganadora del Premio Nobel de Literatura en 1945, intuyó la historia de Lorenzo Reyes y la vinculación que tendrá con el Real Betis Balompié, donde ambos se eligieron mutuamente: "Felices los que eligen, los que aceptan ser elegidos".