A Dorlan Pabón le han bastado seis apariciones con la camiseta del Betis para justificar su llegada en el mercado invernal. Fichado por un precio ínfimo, que no llega al medio millón de euros por seis meses de servicio, el colombiano está aprovechando el escaparate que supone el Betis. Tras tres partidos pegado a la banda derecha, ante
el Málaga le llegó la oportunidad de jugar en punta y la rentabilizó con su primer gol como jugador heliopolitano.
Sin embargo, su mejor actuación llegaría una semana después, en Anoeta, donde firmaría un doblete que reportó a su equipo un punto en la difícil visita a San Sebastián.
Pero si esas actuaciones demostraban que
Stosic había dado en el clavo con su contratación, ante Osasuna su efectividad se disparó hasta límites insospechados. En el primer balón que tocó asistió a Rubén para que anotara el
2-1 definitivo y en su siguiente acción forzó la amarilla para Arribas, que en su intento por detenerle provocó su lesión y que saliera sustituido. Había jugado cinco minutos en los que participó en la acción que definió el encuentro y dio los tres puntos al equipo de Pepe Mel.
Tres goles y una asistencia en 408 minutos, o lo que es lo mismo, una acción definitiva cada poco más de 100 minutos. Números que sonrojan a fichajes estivales como el de
Nosa (317´).