La ACB está muy cerca de empezar y ya ha calentado motores con la disputa de la Supercopa en la que se ha impuesto el Unicaja de Málaga tras ganar una final muy emocionante el Real Madrid, pero como decimos, eso ya es pasado, por lo que se acerca es el inicio de Liga Endesa y Euroliga, donde nada de eso vale y cada semana hay que estar a tope. Además, este año hay una gran novedad, pues ha regresado a España una de las grandes caras del baloncesto FIBA en la última década, Pablo Laso, quien ha abandonado el Bayern de Munich después de solo un año para volver a casa y coger las riendas del Baskonia.
Pero antes del inicio del fuego real, el vitoriano fue protagonista en la vigésima edición del foro organizado por la revista "Dato Económico" de Vitoria, en la que respondió a muchas preguntas y desveló algo que nadie esperaba, y es que al ser cuestionado sobre que jugador de la Liga Endesa incorporaría a su equipo lo tuvo claro, y es que para él el fichaje sería Walter Tavares, el pívot del Real Madrid, a quien considera el jugador "más determinante" de la competición.
Laso explicó además que no le importaría entrenar al Barça, volver al Real Madrid o hacerse cargo de la Selección Española, pero puso la pelota en sus tejados al afirmar que esa pregunta habría que hacérsela a ellos. Aunque uno de los detalles más sorprendentes es que desveló el cambio que haría en las normas, más concretamente en las dimensiones de la pista. “Los cuerpos y los físicos han cambiado y no es posible que se juegue en las mismas medidas. Los espacios me vuelven loco como entrenador".
La vuelta a Vitoria es un proyecto que asume con ganas, aunque es complicado por el estado en el que llegan los de Buesa Arena, no obstante, se ve capaz de hacerlo bien. De hecho así ha empezado, pues calificó de “muy positivo” el balance hasta la fecha con el Baskonia. “Tengo un equipo muy joven, con muchas ganas, físicamente bueno que mejora cada día y muestra hambre para la competición”, dijo, además de indicar que sintió “orgullo” cuando le llamaron desde lo que considera que es su casa.
Además ha traído muchos cambios, tanto a la plantilla como a la gestión y eso puede ser beneficioso, aunque la tarea es muy complicada. Y es que el año pasado el año se les hizo muy larga la campaña entre todas las competiciones y se acabaron quedando de los playoffs -aunque en la Euroliga jugaron los cuartos tras ganar el play-in- y tienen que encontrar la forma de ser lo más competitivos posible de octubre a junio.