La pasada temporada el Real Madrid de baloncesto demostró que en España casi no tiene rival y es el mejor equipo. Además, también fue capaz de corroborarlo en Europa, al menos durante la temporada regular de Euroliga, en la que aprovechó un inicio de campaña absolutamente espectacular, en el que estuvieron meses sin perder. Sin embargo, las lesiones y el cansancio hicieron acto de presencia y el final no fue tan bueno, de hecho, pese a llegar como primeros a la Final Four, las maldición del cabeza de serie número 1 le pesó, y no pudieron defender su título. Panathinaikos, en un partido muy duro, les remontó. Pero ahora el conjunto de Chus Mateo entra en un proceso de regeneración, donde al menos va a mantener un pilar fundamental, Sergio Llull.
El Real Madrid anunció este jueves la renovación por una temporada del escolta de Mahón, que afrontará su decimonoveno curso con la camiseta del conjunto blanco. Llull, que llegó al Real Madrid en 2007 cuando tenía 19 años, tendrá la posibilidad de aumentar un palmarés legendario con 28 títulos en sus vitrinas: 3 Copas de Europa, 1 Copa Intercontinental, 8 Ligas, 7 Copas del Rey y 9 Supercopas de España. Además, es el jugador del Real Madrid que más partidos ha disputado en su historia con un total de 1.083 encuentros, una cifra que podrá aumentar a las órdenes de Chus Mateo en la temporada que empezará el 21 de septiembre con la disputa de la Supercopa de España de baloncesto.
Hace ya muchos años de las múltiples ocasiones que tuvo el balear de salir rumbo a la NBA, donde los Houston Rockets le pusieron sueldos monstruosos sobre la mesa, cuando era con diferencia el mejor jugador de Europa, pero prefirió quedarse en casa. Y ahora, en un momento totalmente diferente, el Real Madrid mantendrá en sus filas a un jugador de 36 años, que con un físico no tan bueno como antes, cuenta con una experiencia clave para mantener la fortaleza de un club que la pasada campaña se proclamó campeón de Liga, de Copa y de la Supercopa de España y que perdió la final de la Euroliga frente al Panathinaikos.
Con la perdida de Rudy Fernández y de Sergio Rodríguez, que tomaron la decisión de retirarse al finalizar la temporada pasada, el Real Madrid necesitaba contar con la veteranía de Sergio Llull. También se marchó Vincent Poirier, que firmó por al Anadolu Efes, mientras que también han renovado Edy Tavares y Mario Hezonja y se confirmó la continuidad de Dzanan Musa. En cuanto a las caras nuevas, los blancos han reforzado su línea exterior con los fichajes de Andrés Feliz, procedente del Joventut Badalona, y Xavier Rathan-Mayes, del Enisey Ruso.