Alvaro Arenillas3 min lecturaEste es ya otro Real Betis Baloncesto. Tras un esperpéntico inicio de temporada, los de San Pablo han dado un enorme paso al frente con Bruno Savignani en el banquillo para sumar ante el Amics Castellò su tercer triunfo en los últimos cuatro partidos, el cual le permite tomar distancia con los puestos de descenso y situarse en una cómoda 10ª posición con un balance de 7-12.
Si bien el resultado final fue un aplastante 98-77, tal diferencia no se vio a lo largo de un primer tiempo en el que los levantinos fueron capaces de plantar cara con su fortaleza en la pintura, la cual hizo mucho daño al cuadro local. Así, y aunque el Betis empezó poniéndose 17-9 arriba gracias al acierto de Polanco, la reacción de los visitantes fue rotunda.
Con una renta cómoda, los de San Pablo sufrieron una inesperada desconexión para ver como el dominio bajo los aros se iba imponiendo para que los visitantes llegasen incluso a ponerse por delante por 25-27. Exacto, tras un gran inicio de los heliopolitanos, todo fue cambiando hasta el punto de que los últimos minutos del primer tiempo sólo le sirvieron para remontar, pero no para cobrar ventaja. Así, al descanso el electrónico reflejaba un apretado 40-36.
Ya en la segunda parte llegó el momento de De Bisschop. Éste dio un paso al frente y golpeó una y otra vez a Okouo para marcar el camino al resto del equipo. Así, fueron Frazier, Joaquín Rodríguez y Kuksiks quienes empezaron a anotar para a base de triples ir aumentando la ventaja hasta que se estiró a una diferencia de 18 puntos (66-48) de la que los visitantes nunca lograron recuperarse.
Pese a la diferencia entre ambos, el equipo dirigido por Orenga no se rindió y esté ordenó a los suyos realizar una zona presionante frente a la que Savignani no dudó para pedir tiempo muerto, dar ciertas directrices claras a sus jugadores y controlar el encuentro hasta la bocina final.
Cerrado el choque, una jornada más quedó claro que el Betis de la segunda vuelta es mucho mejor que el del inicio el curso; tanto es así que los rivales acaban sucumbiendo ante el ejercicio coral de los verdiblancos, que además hace tiempo que cuenta con el buen estado de forma de muchos de sus jugadores. Queda mucho por delante y todo podría cambiar, pero el presente de los verdiblancos invita a ser optimistas para lo que queda por delante.