Betis Baloncesto 77-65 Estudiantes: El Betis se agarra a la vida y se lo jugará todo en Madrid

Reacción de mucho mérito la del Betis Baloncesto, que este domingo consiguió lo que hace nada parecía imposible. Los verdiblancos vencieron de manera contundente, aunque no sin tensión (77-65) a Movistar Estudiantes y fuerzan el quinto y definitivo partido, el cual se disputará en Madrid y donde podrán completar una remontada impresionante, cerrando el pase a la Final Four de la LEB Oro para intentar volver a La Liga Endesa.

El partido no fue fácil, con los verdiblancos guiados por Joaquín Rodríguez y Eddy Polanco. El Betis demostró lo que le ha faltado en muchos partidos y que ha recuperado al final de estos play-offs, un coraje que sólo aflora en los momentos difíciles, y es que este y el anterior duelo eran partidos a muerte. El partido acabó con un 46-22 en rebotes (14-2 en ataque), lo que viene a demostrar que cada pelota era una batalla que había que ganar, algo que sabían los jugadores béticos.

Polanco, que no cuajó un buen encuentro el viernes, se mostró muy activo en la dura guerra de este domingo, anotando 15 puntos al descanso. 17-9 y 18-22 fueron los marcadores de los dos primeros cuartos, un 35-31 al descanso que era corto para todo lo que restaba de partido.

San Pablo jugó un papel fundamental en el tercer cuarto, cuando los verdiblancos metieron una marcha más y, de nuevo gracias a Eddy Polanco, fueron capaces de colocar la máxima diferencia en el electrónico +14 (59-45). El tercer cuarto acabó con 62-48 para los locales, aunque todavía queda mucho por remar.

Pese a que Movistar Estudiantes lo intentó, los madrileños no fueron capaces de disminuir mucho la diferencia, siendo muy fallones en la anotación y sin encontrarse cómodos en la pista. Todo esto lo aprovechó muy bien el Real Betis Baloncesto, que sentenció el encuentro y acabó ganando 77-65. Todo se decidirá en el último y definitivo choque, un quinto partido que al inicio de la eliminatoria parecía impensable. El ganador pasará a la Final Four de la LEB Oro, en otra batalla todavía más épica por volver a la máxima categoría del baloncesto nacional.