Como si fuese un círculo vicioso sin fin, un año más están en Dallas dándole vueltas a qué hacer para rodear a Luka Doncic con las mejores piezas posibles. El curso pasado, haciéndose con Kyrie Irving vía traspaso, parecieron dar un buen paso en la dirección correcta; y así fue, pero sigue siendo insuficiente.
Con colosos como Denver Nuggets u otros equipos que han dado un salto enorme en la actual campaña de la NBA como Minnesota Timberwolves, Dallas vuelve a estar en tierra de nadie. Sí, están ganando partidos y actualmente ocupan la sexta plaza de la Conferencia Oeste, pero siguen lejos del objetivo: ser un contender. Por ello, y mientras se espera a que se muestren agresivos antes del cierre del mercado de traspasos en febrero, han cerrado la incorporación de un jugador de segunda línea con la idea de comprobar de primera mano si puede aportarles lo que desean.
Según informa Shams Charania de The Athletic, la organización de Texas está cerrando la incorporación del guard Brandon Williams, un chico de 24 que actualmente estaba jugando en los Osceloa Magic de la G League para firmar un promedio de 23,9 puntos y 5,6 asistencias por noche.
Formado en la Universidad de Arizona, donde estuvo un solo año para promediar 11,4 puntos, 3,8 asistencias y 2,8 robos, Williams se presentó al draft de 2021 sin llegar a ser seleccionado por ninguna franquicia. Pese a ello, la pandemia y lesiones de varios jugadores le permitieron debutar con Portland Trail Blazers en la campaña 2021-22, en la cual llegaría a disputar 24 encuentros para irse a una media de 12,9 puntos, 3,9 rebotes y 3,1 asistencias. Posteriormente, el curso 2022-23 lo pasó en la G League y en septiembre de 2023 selló un contrato con Orlando Magic, equipo que optó por despedirle en octubre antes de que el acuerdo quedase garantizado. Respecto a la situación en la que se incorpora ahora a los Mavs, lo hace a través de un two-way contract.
Aunque Dallas hace bien en probar cosas, lo cierto es que necesitan dar bastantes pasos más si realmente quieren mirar de tú a tú a los mejores equipos de la NBA. Este año, con la llegada de un novato que juega de pívot, se ha demostrado que por ahí tenían mucho margen de mejora. Ha sido un pequeño alivio, pero sigue lejos de ser una solución real para aspirar a lo más alto.