Luka Doncic está viviendo con sus Dallas Mavericks una de las mejores campañas desde que el esloveno llegó a la NBA, en la que además de estar optando al MVP, parece que por fin las cosas les empiezan a funcionar a los de Jason Kidd, que ahora sí que tienen en la unión de Luka y Kirie Irving a una pareja con la que soñar, además de que tras la llegada en el 'trade deadline' de PJ Washington y Derek Gafford, han ganado mucho fondo de armario, y junto al rookie Dereck Lively, al hecho de la defensa el fuerte de los tejanos. También les ha ayudado el cambio de tendencia arbitral de final de temporada, que permite cada vez más contacto entre los defensores y los atacantes. Sin embargo, al final lo más importante sigue siendo Doncic.
El 77 está promediando 34 puntos, lo que le coloca como el máximo anotador de la liga, 9,1 rebotes y 9,8 asistencias, además de que lo está haciendo de forma efectiva, al tener un destacable 48% en tiros de campo y un muy buen 38% desde la línea de tres, su máximo en sus seis años en la liga, como también récord personal son los 1,5 robos por noche. En todo caso el MVP va a estar muy competido, porque si su campaña es antológica y digna de estar en los libros de historia, la de Nikola Jokic no le va a la zaga.
Ahora el ex del Real Madrid ha alcanzado una cifra que le va a hacer muy muy rico, la de 65 partidos jugados. Esto se debe a que en el último convenio colectivo firmado entre los jugadores y la liga se estableció el mínimo de partidos que se debían jugar para optar a los galardones de final de campaña, tanto premios individuales como presencia en los mejores quintetos, y por eso mismo Doncic va a acabar en el primer equipo 'All-NBA' y va a poder firmar una extensión 'súper máxima' de 5 años por 346 millones de dólares, lo que equivalen a 69,2 por campaña. Aunque eso sí, no podrá hacerlo este verano, ya que para optar a ella hay que haber disputado al menos siete años en la liga, algo que Luka cumplirá al término de la 2024-25, pero ya es solo cuestión de tiempo, porque los requisitos necesarios que dependían de él los ha cumplido en la pista, ganándose firmar el que será el contrato más lucrativo de la historia de la NBA.