Desde que ganaran el anillo en 2020, Los Angeles Lakers no levantan cabeza. Cierto que, a principios de temporada, hicieron historia al adjudicarse la primera 'Copa NBA', el NBA In Season Tournament, pero al final, un año más, los 'play off' han sido una decepción y han caído a las primeras de cambio.
En los primeros días de mercado se habló mucho de que podían aterrizar en Los Angeles algunas de las codiciadas piezas que quedaban libres, pero al final los Klay Thompson, Paul George... acabaron en otros equipos. De hecho, lo más destacado que ha sucedido en estos dos últimos meses en cuestión de contrataciones ha sido la elección en el Draf de Bronny James, el hijo de LeBron.
Sin embargo, han tomado otras dos decisiones que pueden ser trascendentales y con las que esperan revitalizar la franquicia. Una fue la elección de un nuevo entrenador, algo que llegó nada más acabar la temporada. La directiva del club angelino tomó medidas y despidió en seguida a Darvin Ham para darle la responsabilidad de dirigir a los oro y púrpura a su exjugador J.J. Redick.
"En cierta manera, queríamos un enfoque fresco y Redick tiene una visión propia. No me siento cómoda hablando de la parte baloncestística, pero necesitábamos un entrenador que nos brindase algo diferente. Y que invierta en el talento joven", aseguraba esta misma semana Jeanie Buss, la presidenta de los Lakers.
La otra decisión ha sido más reciente y no menos importante. Los Angeles Lakers han incorporado a Leroy Sims como nuevo director del departamento de salud y rendimiento de jugadores. Se trata de una persona reconocida en su trabajo y que llega de ocupar el cargo de jefe de operaciones médicas de la NBA. Trabajará junto a otra de las piezas clave de toda la estructura angelina, Rob Pelinka.
Aparte de su brillante trabajo con la NBA, Leroy Sims tambien tiene experiencia trabajando con la selección de Estados Unidos y con los Golden State Warriors. Y, con su llegada, los Lakers quiere frenar los numerosos problemas físicos que han arrastrado durante las últimas temporadas y, en especial, este año.
Redick y Sims tratarán de ayudar a cambiar la dinámica de un equipo en el que LeBron James y Anthony Davis siguen siendo los líderes, en el que siguen Austin Reeves o D'Angello Russell y que va a contar con casi los mismos mimbres que el pasado año tuvieron tantos altibajos en el campeonato.