James Harden parece que está volviendo poco a poco al redil de la disciplina que conlleva ser un jugador de la mejor liga de baloncesto del mundo, la NBA. El ya jugador de Los Ángeles Clippers ha protagonizado este verano un auténtico bombazo con su traspaso desde los Philadelphia 76ers al conjunto angelino.
Cabe recordar que fue el propio jugador el que pidió el traspaso a final del mes de junio tras ejercer su opción de jugador. El caché del MVP de 2018 es tal que le sería más sencillo encontrar acomode en otro gran equipo al ser intercambiado por un buen contrato, que ser firmado en la agencia libre.
Finalmente llegó a los Clippers tras un verano en el que estuvo desaparecido más de una semana de los 76ers y del que fue expulsado del avión que llevaba a los de Philadelphia a la gira previa al inicio de la temporada. Harden, ya asentado en su nuevo equipo habló por primera vez sobre cómo se siente dentro de la pista y su papel como jugador en relación al sistema: "Si tengo una voz donde puedo decir al entrenador: 'Oye, veo esto. ¿Qué piensas?' Y hay alguien que confía en mí, que cree en mí, que me entiende. Yo no soy un jugador de sistemas. Soy un sistema", toda una declaración de intenciones de Harden en su presentación con los Clippers ante los medios de comunicación.
James Harden además fue muy claro sobre lo que busca en cada partido, tanto con sus compañeros como con el entrenador que los dirija desde el banco. El MVP de 2018 'pasa' de grandes registros anotadores y busca resolver los problemas que se plantean durante los choques: "Alguien que pueda tener ese diálogo conmigo, que entienda, que avance, que resuelva y haga ajustes sobre la marcha y a lo largo de los partidos, eso es lo que realmente me importa. No se trata de que meta como 30 o 40 puntos. Ya he hecho eso". En relación a la comodidad que tenía en Philadelphia, James Harden fue muy claro al afirmar que se sentía "con una correa".
Harden fue claro y sincero al afirmar que esperaba un futuro diferente en Philadelphia, retirándose allí pero en su ex equipo tenían otros planes: "Cuando dejé Brooklyn pensaba que me iba a retirar como Sixer, pero la directiva tenía otros planes. No me querían, es así de simple". Todas estas declaraciones no han tardado demasiado en tener respuesta desde los Sixers, donde Embiid desdijo un tanto lo afirmado por su ya ex compañero.
El jugador de los Sixers fue rotundo al hablar de que Harden era el protagonista del juego en todo momento y por eso en cada jugada el balón pasaba por sus manos: "Le permitimos ser simplemente él mismo y le dimos el balón en cada posesión porque es realmente bueno. Es un jugador increíble. Yo no paso tan bien así que por eso le dimos el balón".
En definitiva, James Harden sigue dando que hablar mucho más allá que por su propio juego, el cual están ansiosos de ver en los Clippers, por sus actos extradeportivos fuera de la pista con declaraciones que no suelen dejar indiferente a nadie y con idas y venidas que han tenido en vilo a toda la NBA por saber cuál iba a ser su futuro tras ser vinculado a varios clubes.