De exhibición en exhibición. Luka Doncic está que se sale en la NBA. Los Dallas Mavericks no quieren repetir la decepción de la pasada temporada, cuando se quedaron fuera de los 'play-off' y están firmando un inicio de curso brillante en esta 2023/2024, en la que suman dos victorias en dos partidos con el base esloveno intratable e imparable. La pasada madrugada volvió a liarla ante Brooklyn Nets. Su equipo perdía de cinco (110-115) a falta de sólo tres minutos para el final del encuentro y el ex del Real Madrid lo solucionó con una racha de puro espectáculo para remontar el marcador y acabar celebrando un triunfo por cinco de diferencia (125-120).
Doncic ya traía la muñeca caliente. Empezó la temporada en la NBA con dudas porque había arrastrado molestias físicas en la 'preseason', -apenas pudo jugar ante 'su' Real Madrid- pero las ha disipado todas de un plumazo con dos actuaciones dignas de lo que es, una superestrella de la mejor liga de baloncesto del mundo a sus aún tempranos 24 años. Antes de recibir a los Nets en el American Airlines Center, el '77' venía de sumar un triple doble -33 puntos, 12 rebotes y 10 asistencias- en la victoria de su equipo contra los San Antonio Spurs de Victor Wembanyama.
En la madrugada de este sábado, Doncic destrozó al equipo neoyorquino con 49 puntos, acompañados de 10 rebotes y siete asistencias. Sus números ante los Nets fueron asombrosos, con 16 de sus 25 tiros de campo anotados (un 64 por ciento de acierto) y con nueve triples, entre ellos cuatro seguidos en ese frenético tramo final de partido que le dio la remontada y el triunfo a Dallas. Tim Hardaway, con 19 puntos, fue el mejor socio del esloveno.
El público del American Airline vibró con esos tres minutos de ensueño de su jugador franquicia, que se hizo gigante justo en esos instantes en el que el reloj de la posesión parece avanzar más rápido, el balón quema y los brazos se engarrotan. No le sucedió eso a Doncic, ni muchísimo menos, como se puede ver en el vídeo compartido por NBA Spain en redes sociales. La intensidad del griterio va subiendo a medida que el base local va enchufando tiros desde el perímetro, entre ellos uno imposible a tabla y casi de espaldas, sin mirar a la canasta, que desató un cántico unánime de la afición de los Mavs: "MVP, MVP, MVP...". Dale al play y disfruta.