Alvaro Arenillas3 min lecturaSe acabó el culebrón Kyrie Irving, al menos para los Brooklyn Nets. Según ha adelantado Shams Charania de The Athletic, la organización neoyorquina ha cerrado el traspaso del base All-Star a Dallas, donde formará una pareja de auténticos jugones junto a Luka Doncic.
El acuerdo, el cual se ha sellado después de que Irving solicitara un intercambio a los Nets hace escasos días, se completa con la llegada a la ciudad que nunca duerme de Spencer Dinwiddie, Dorian Finney-Smith, una primera ronda sin protección para el draft de 2029 y dos segundas rondas para 2027 y 2029. Para cuadrar salarios, Brooklyn también envía a los Mavs a Markieff Morris.
Este movimiento, el cual deja a Lakers y Clippers con la miel en los labios, supone la reunión en un mismo equipo de dos de los jugadores más habilidosos que se han visto en la NBA como son Irving y Doncic. Desde hace mucho tiempo se venía exigiendo a la franquicia propiedad de Mark Cuban que fuese agresiva en el mercado para dar al genio esloveno lo que necesitase para ser campeón. Pues bien, ya tiene a todo un All-Star a su lado.
Respecto a cómo puedan compenetrarse sobre el parqué, se trata de dos chicos a los que les encanta tener el balón en sus manos; es más, Doncic suele ser el jugador que más tiempo lo tiene en su poder de toda la Liga. De conseguir que esto no sea un problema dependerá gran parte de las opciones de los de Texas en lo que queda de temporada regular y en unos hipotéticos playoffs.
La gran noticia para los Mavericks, más allá de la llegada de un jugador del nivel de Irving, es que este llega en un fantástico momento de juego; tanto es así que en el presente curso está promediando 27,1 puntos, 5,3 asistencias, 5,1 rebotes y 1 robo por partido, números que le han hecho estar presente en el fin de semana de las estrellas que tendrá lugar en este mes de febrero, y en el que por supuesto coincidirá con Doncic.
Aunque Dallas ha perdido un par de jugadores de cierta importancia, de igual modo mantiene en su roster a otros del calado de Tim Hardaway Jr. o Christian Wood, por lo que Jason Kidd contará con piezas suficientes como para dar forma a un proyecto que a partir de ahora no tendrá otra meta que la de salir campeón.