La temporada del Real Madrid de baloncesto no está siendo ni mucho menos todo lo buena que se esperaba a principio de curso, aunque es cierto que se afrontaban muchos cambios con ausencia destacadas y sus mejores jugadores cada vez más mayores. Pero aún así no se podía imaginar nadie un pinchazo del calibre que han tenido, bordeando los puestos de 'play-in' en la Euroliga y con una derrota muy dura en la final de Copa del Rey ante Unicaja, aunque lo van salvando en la ACB, donde son líderes. Sin embargo, si que queda mucho por hacer, pero se están sentando las bases de un proyecto futuro, además de que ya se ha encontrado una joya para comandarlo, Hugo González.
El escolta es uno de los mayores proyectos del baloncesto español y con solo 19 años recién cumplidos se ha ganado un hueco muy grande en la rotación de Chus Mateo, al punto de que es quizá el gran baluarte de la defensa exterior blanca. Pero todo eso sumado a que su mejora en ataque aunque lenta, se está viendo, y en cuanto la complete podemos estar ante el siguiente gran jugador del baloncesto patrio. Y Sergio Scariolo es consciente, por eso se lo ha llevado a la selección para los partidos de esta semana.
González se ha mostrado "muy feliz e ilusionado" por su primera convocatoria con la absoluta y ha asegurado que es "un premio a la temporada y al esfuerzo realizado en las categorías inferiores". Y es en ellas lleva años sumando éxitos verano tras verano. "Tenía muchas ganas de que llegara este día y he tenido la suerte de que ha sido muy pronto en mi carrera profesional". Ha tenido la suerte de que estos días no hay Euroliga, algo de lo que se dio cuenta cuando vio el calendario y 'apretó' para convencer a Scariolo: "cuando supe las fechas de las ventanas tuve claro que, si llegaba la convocatoria, iba a venir".
Por ahora está siendo muy bien recibido por los veteranos, pues "todo el mundo me está arropando y ayudando mucho". "Se nota que soy nuevo y soy el más joven en La Familia". Mientras que eso no evita que Scariolo le apriete, ya que para el técnico italiano es uno más y le ha pedido "compromiso, sacrificio", jugar como él sabe y "que disfrute de la experiencia". Y no va a ser la última vez que se ponga la rojigualda, puesto que a sus 19 años tiene un camino de oro por delante en el baloncesto mundial.