Un Real Madrid de dos caras, un Miller-McIntyre de otra galaxia y las lagunas ofensivas del Valencia dejan un arranque de jornada en la Euroliga agridulce para los equipos españoles, entre los que sólo ganó un Baskonia que se afianza en puestos de 'play off', mientras Valencia se complica y el Madrid podría perder parte de la gran ventaja que sigue teniendo al frente de la clasificación.
El equipo madridista cosechó su cuarta derrota de la temporada en la Euroliga, todas ellas a domicilio, al no ser capaz de reponerse en la pista del EA7 Emporio Armani Milán (81-76) de un aciago primer tiempo en el que llegó a perder de 21 puntos y acabó cediendo de 19 al descanso.
Encaraba el duelo el conjunto español con el estímulo que suponía cerrar su clasificación para los 'play off' de la competición con ocho citas aún por disputarse. Para ese objetivo recuperaba además a Walter Tavares y a Sergio Llull, a los que por momentos había echado de menos durante sus lesiones. Pero el equipo salió dormido y se vio desbordado por Olimpia en el que Mirotic y Shields fueron una pesadilla. Una reacción en el último cuarto, que les puso a tres puntos, abrigó sus esperanzas, pero esta noche no era la suya y acabaron cediendo.
Un Codi Miller-McIntyre de récord, con 20 asistencias, tope de la Euroliga, y un triple doble (11 puntos y 11 rebotes) tan poco habitual fuera de la NBA, lideró al Baskonia ante un tocado Asvel Villeurbanne, al que se impuso por 94-80, después de dominar un partido de principio a fin para dar un salto clasificatorio importante y afianzar sus plazas de 'play off'.
Los galos notaron las importantes bajas de Youssoupha Fall y Nando De Colo y tuvieron una noche aciaga en el lanzamiento exterior con dos triples convertidos de 20 intentados.
Y, además, se encontraron con un Codi Miller-McIntyre inspirado, que fue el protagonista de la noche con 42 créditos de valoración y 20 asistencias que ya son historia de esta competición.
El tercer equipo español que jugó este jueves, el Valencia Basket, no pudo celebrar la renovación de Justin Anderson con un triunfo. El equipo de Mumbrú acusó sus lagunas ofensivas, encadenó en varias ocasiones demasiados minutos sin anotar y dejó el camino libre al Olympiacos para sumar la victoria (65-78) en la Fonteta, pero también para despegarse dos victorias del conjunto 'taronja' en la apretada luchar por los 'play off' de esta Euroliga.
Los levantinos, en los que Mumbrú acabó expulsado por protestar, consiguieron rehacerse de un primer parón anotador en el segundo cuarto, pero le volvió a pasar en el inicio del tercero y en ese momento, enmarañado en peleas con los colegiados pero de nuevo sin demasiadas ideas ni referentes ofensivos, perdió definitivamente el hilo del encuentro.