Alberto Gálvez4 min lecturaEl Barça reaccionó este martes y sometió al Fenerbarbahce Beko Estambul (90-63) de Sarunas Jasikevicius a una auténtica paliza. Al menos, el lituano fue ovacionado en su regreso al Palau Blaugrana, en un partido en el que el cuadro español mandó en el marcador durante los cuarenta minutos.Precedido por una racha de cinco derrotas en las seis últimas jornadas europeas y de siete tropiezos en diez partidos entre todas las competiciones, el equipo entrenado por Joan Peñarroya dio un golpe sobre la mesa y cuajó la actuación más sólida de las últimas semanas gracias a su mejoría defensiva.
Y el preparador barcelonista respiró aliviado en la sala de rueda de prensa: "Hemos tenido un mes difícil y por ganar un partido no cambia todo. Ganar hoy era importante para nosotros por cómo habían sido los últimos partidos, pero no le doy más trascendencia (al triunfo). Estamos en diciembre, en disposición de luchar por todo. Se trata de llegar en las mejores condiciones cuando toca. En el camino tenemos que mejorar y ganar, y hacer más partidos como este".
Cuestionado por si se trata de su mejor partido de la temporada, el técnico dudó: "Seguramente lo sea por el resultado, la entidad del rival y cómo lo hemos hecho en aspectos en los que nos estaba costando más. Excepto en el segundo cuarto, en el que nos han castigado en el rebote, hemos dejado al Fenerbahce en un anotación muy baja y hemos tenido acierto en los momentos importantes".
Por último, Peñarroya recalcó la clave del partido para intentar que sirva de aviso para toda la temporada: "Tenemos jugadores buenos, pero la clave es estar concentrados. Es momento de sufrir y estar juntos. Y cuando las cosas no salgan, saber que esto es muy largo y tenemos una hoja de ruta, no caer en la frustración como en partidos anteriores. Hoy hemos dado un paso adelante".
En el banquillo visitante, Sarunas Jasikevicius se llevó la ovación de la noche en el Palau Blaugrana. Y al finalizar el encuentro, el entrenador del Fenerbahce Beko Estambul tuvo un mensaje de agradecimiento para el club y para la afición culé: "He venido aquí para hacer mi trabajo, pero tengo que dar las gracias al Palau y a la gente. Mi relación con el Palau siempre ha sido increíble, me ha apoyado mucho en los momentos difíciles y siempre me recibe bien. Estoy eternamente agradecido al Palau, nunca lo olvidaré".
Cabe recordar que el lituano fue jugador del Barça en dos etapas (2000-2003 y 2012-2013) y regresaba al Palau Blaugrana por primera vez desde que dejó el banquillo del club catalán en el verano de 2023 después de tres temporadas en el cargo, admitió que los locales merecieron ganar.