Alvaro Arenillas3 min lecturaFantástica noche de Euroliga la que hemos vivido con hasta tres equipos españoles en liza. Tras el triunfo del Real Madrid en cancha de Olympiakos, solo el Barça jugaba a domicilio y lo pagó con la única derrota de la jornada para un equipo español, ya que sucumbió en un apretado encuentro ante el Virtus Bolonia. Mientras, en Vitoria Markus Howard volvía a disfrazarse de héroe para batir al Fenerbahce, y en La Fonteta se vivía una auténtica fiesta de un Valencia Basket que puso fin a una nefasta racha de cinco derrotas consecutivas en la máxima competición continental.
Si hablamos de magia hay que hacerlo de Markus Howard. El estadounidense levantó al Baskonia con un triple final ante el Fenerbahce que dio la victoria este miércoles al equipo vasco por 80-79, en un choque cargado de alternativas y en el que los turcos tuvieron el último lanzamiento para llevarse el triunfo. Sin embargo, fueron los 28 puntos de Howard los que se impusieron al liderar la reacción de su equipo tras un mal arranque, pero con tiempo suficiente para hacerse con la séptima victoria de la temporada europea y seguir subiendo posiciones.
El Valencia Basket rompió su racha de cinco derrotas consecutivas en la Euroliga ante el Estrella Roja en un encuentro en el que en la primera parte supo romper el bloqueo con el que afrontaba el encuentro y en la segunda, aunque bajó sus prestaciones, supo sufrir para llevarse el triunfo. Lo cierto es que el choque estuvo marcado por varios nombres propios. Así, los locales agradecieron cada minuto que estuvo en la pista Stefan Jovic y sufrieron en esos momentos en los que Milos Teodosic comandó las operaciones visitantes. En cualquier caso, los puntos de Brandon Davies y Semi Ojeleye y la buena lectura de Víctor Claver en los momentos más complicados les permitió no caerse. En un final de infarto, una canasta de Jared Harper, un fallo de Teodosic y dos tiros de Davies, terminaron decidiendo.
La única nota negativa de la jornada la han dado los catalanes. El Barça perdió en la pista del Virtus Segafredo Bolonia en un partido en el que el conjunto azulgrana se vio superado en la segunda parte (47-30 de parcial) por la intensidad de los locales y el acierto de un fantástico Iffe Lundberg (21 puntos). Lo cierto es que fue un choque con dos caras completamente diferentes, ya que en el primer tiempo los culé llegaron a estar 16 puntos arriba. Aunque el Barça reaccionó para ponerse por delante a un minuto del final (74-75), el Virtus decicdó mejor en los instantes finales.