No es ni mucho menos el mejor momento de la selección española de baloncesto, ya que los grandes jugadores que en las últimas dos décadas han colmado de éxitos a nuestro país están retirándose y en este momento 'La Familia' está en pleno proceso de cambio generacional. Por lo pronto lo están haciendo bien, como se pudo confirmar con el título europeo, pero en el pasado Mundial todo se vino abajo. No obstante, el objetivo son los Juegos Olímpicos, y así van a luchar en unas semanas en el Preolímpico de Valencia por clasificarse, aunque no va a ser nada fácil. No obstante, han apostado por la continuidad, ya que se ha renovado al gran artífice de los últimos éxitos, Sergio Scariolo, que seguirá siendo seleccionador al menos hasta 2028.
Este jueves se ha formalizado el acuerdo de renovación del italiano como seleccionador para los próximos cuatros años. Un reto que comienza en el Preolímpico de Valencia pero que tiene como objetivo el medio plazo y el relevo generacional de la selección que llegó a ser número 1 mundial del ranking FIBA. Elisa Aguilar, Presidenta de la FEB, recalcó que es "indudable" que no hay nadie mejor que Scariolo para seguir optando a tener buenos resultados en los próximos campeonatos. Se refirió al oro europeo de Berlín como un ejemplo del gran trabajo. Ya que se consiguió “por el talento, el sacrificio y la entrega de nuestros jugadores, y "muy especialmente", por la dirección del grupo que hizo el técnico, por "su capacidad para entender la situación real del equipo, y para encontrar la fórmula con la que maximizar las virtudes de nuestros jugadores y minimizar sus errores".
Por su parte, Scariolo reconoció la dificultad del momento, el "más difícil" desde que llegó en el 2009. También analizó los retos a medio plazo: “el primer objetivo es llevar a cabo un recambio generacional que ya ha empezado, acelerar el trasvase de unos jugadores que no tienen todavía la experiencia internacional y profesional. Pero el segundo objetivo es mantener lo más alto posible la capacidad competitiva del equipo. Es innegociable competir hasta el final y darlo todo por esta camiseta.”
El seleccionador nacional quiso también repasar los problemas del baloncesto español en este momento, que son que “el protagonismo de los jugadores españoles es muy bajo en la ACB". Y en la NBA tenemos "mucha menos presencia que en años anteriores". Esa es la situación actual, pero cree que hay margen para recuperarla. "Los jugadores necesitan nuestra confianza y la de sus clubes, y una vez que se le pueda dar esa oportunidad, el talento hará que podamos competir con las grandes potencias mundiales. Es responsabilidad de todo el mundo proteger a quien invierta en el jugador español”.