El Real Madrid tenía asumida la más que probable marcha de Guerschon Yabusele después de sus grandes actuaciones en los Juegos Olímpicos de París 2024 y de que dejara caer en ellos que su idea era tener una segunda oportunidad en la NBA. Con la demostración de fuerza que hizo ante jugadores consagrados en la Liga norteamericana y, en especial, con la gran final que realizó ante Estados Unidos, llamó la atención de las franquicias que buscaban jugadores para la posición en la que se desenvuelve.
Los dos nombres que a lo largo de estos días salieron, de hecho, son claros candidatos a los 'play-offs' e, incluso, a ganar el campeonato de la NBA. Así, los Cleveland Cavaliers fueron los primeros que se supo que se habían interesado por el madridista, aunque finalmente serán los Philadelphia Sixers los que se lo lleven. El equipo de la costa Este de Estados Unidos ha sumado este verano a Paul George a las estrellas que ya tenía y que encabezaban Jel Embiid y Tyrese Masey. Es un proyecto muy atractivo para cualquiera y Yabusele quería ir a un equipo con opciones de ganar.
La cuestión es por qué elige regresar a la NBA cobrando menos que la mitad que en el Real Madrid y teniendo que afrontar una 'penalización' de 2.5 millones, que debe pagar él y que es lo que ahora mismo está negociando con el club blanco. Podrían ser varios los motivos de su regreso al baloncesto norteamericano, pero no el económico, al menos de forma inmediata.
Uno puede ser el reto de jugar en la mejor Liga del mundo, algo que llevó a Camapzzo o a Deck a la NBA en los últimos años, pero no a un Yabusele que ya ha estado allí. Y otro puede ser el reto de triunfar en este campeonato tras su fiasco en los Boston Celtics, algo similar a lo que el 'Chacho' Rodríguez realizó hace unos años, cuando se fue, precisamente, a los Sixers. Pero al igual que el tinerfeño, Guerschon Yabusele no tiene asegurada su continuidad en la NBA más allá del próximo año.
Si se confirman las informaciones procedentes del otro lado del Atlántico, el francés va a firmar por un año con opción a otro más. Y tendrá que ganarse en la pista su continuidad en la NBA. Y, mientras, ganará el salario mínimo, que, con la reducción de impuestos, se le quedará en torno a un millón de euros por la próxima temporada.
El motivo de arriesgar tanto está en la pensión que la NBA destina a los exjugadores. Y para la que le queda jugar un año más en el campeonato norteamericano después de haber estado dos temporadas con contrato en los Celtics. Yabusele se asegura un mínimo con esos tres años, a los que se añaden un seguro médico vitalicio y otras ventajas.
Si logra triunfar y estar más años en la NBA, las cantidades subirán, pero con uno sólo se lo habrá asegurado y, si no le sale bien la jugada, siempre podrá regresar a Europa, donde tiene cartel de estrella Top. Y con el seguro en el bolsillo para incidencias futuras.