Se llama Pedro González y es natural de Tegueste, una localidad de Santa Cruz de Tenerife. A sus 17 años ya se ha ganado el prestigio en la galaxia futbolística. Y es que todo el mundo habla de
Pedri. Con permiso de Ansu Fati, este jovencísimo mediocentro ofensivo se ha convertido en la nueva perla del
FC Barcelona, después de haberlo fichado la temporada pasada a cambio de
cinco millones de euros y dejarlo un año más en Las Palmas, en condición de cedido.
Este pasado verano, sin ir más lejos, se debatía si tendría oportunidades en el conjunto culé, teniendo reservado un sitio en el primer filial azulgrana si este ascendía a Segunda. El plan estaba marcado: hacer la pretemporada con el Barça y luego Dios diría... Muchos equipos estaban a la espera de su futuro para hacerse con una posible cesión en Primera.
El Betis, como bien informó ESTADIO Deportivo, era uno de ellos. Sin embargo,
Pedri sólo no ha acabado saliendo en préstamo, sino que también está sumando continuidad con la camiseta azulgrana, habiendo participado en todos los partidos oficiales que el Barcelona ha disputado esta temporada: seis en LaLiga y dos en Champions. Un total de 371' en los que, además, ha sumado un tanto en la máxima competición de clubes a nivel continental, frente al Ferencvaros. 17 años tiene...
Lo que pocos saben es que Pedri bien
podría estar luciendo ahora otra elástica que no fuera la azulgrana. Y no me refiero a la merengue del Real Madrid, donde fue a hacer una prueba y una nevada se lo impidió.
Blanquirroja o verdiblanca podría haber sido su indumentaria actual, pues este joven futbolista
fue durante unos meses una oportunidad de mercado que a todos los grandes clubes, los dos sevillanos inclusive, se les escapó. Y además
gratis.Así se lo cuentan a un servidor desde Canarias: en el verano de 2019, con Pepe Mel a la cabeza de la UD Las Palmas y con un equipo, el canario, asfixiado por las restricciones económicas de LaLiga y unas arcas vacías, el futbolista fue ofrecido a todos los clubes de Primera habidos y por haber (también hubo interés de alguno extranjero). Mel, sin ir más lejos, habló con el Real Madrid y el Betis, junto a algún otro. En ese momento es cuando llega, también, el ofrecimiento a las oficinas de Nervión.
La idea era sacarle los cinco millones de euros que el Barcelona acabó poniendo ese mismo septiembre; cantidad que ha venido pagando a plazos hasta la fecha. Un auténtico dineral para un futbolista que apenas tenía rendimiento en Segunda y que
ahora, lógicamente, resulta ser
un negocio redondo, con un v
alor de mercado (según Transfermarkt) de 15 millones de euros. Lo que nadie cuenta es que en ese mes de junio, justo antes de que la UD y Mel comenzaran a ofrecerlo tras haberlo blindado en julio con un contrato profesional del B, podría haberse ido totalmente gratis a cualquier equipo bajo un cambio de residencia. Una auténtica ganga que se escapó a
Sevilla FC y Real Betis, así como al resto de clubes a los que fue ofrecido justo 30 días después, cuando los cinco kilos que solicitaba la UD Las Palmas se antojaban prohibitivos.