Marlos Romero Bonfim (07/06/1988), extremo derecho del
Shakhtar Donestk que exhibió tanto en Lviv como en Nervión su peligrosidad con espacios, cuajando dos destacadísimas actuaciones con la elástica del Shakhtar en las que dejó con la boca abierta a los sevillistas, daría lo que fuera por militar la próxima temporada en España, siendo el
Sevilla y el
Ramón Sánchez Pizjuán un destino que se le antoja ideal para continuar creciendo como futbolista profesional.
Enamorado de la
Liga y del balompié español, su visita al Sánchez Pizjuán le dejó un dulce sabor de boca, alucinando, literalmente, con el ambiente vivido en las gradas de la 'Bombonera' de Nervión; un clima cálido y opuesto al que acostumbra a vivir en
Ucrania que le sedujo como futbolista. "Jugar en España es un sueño que tengo desde pequeño y espero conseguirlo, doy el nivel para ello", comentó el propio futbolista durante una
entrevista concedida ESTADIO Deportivo justo antes de pisar el césped del Sánchez Pizjuán, momento tras el que pudo vivir de primera mano la magia del club blanquirrojo y del sevillismo, habiendo manifestado ya a su círculo el gusto por poder defender la elástica sevillista en un futuro.
"¿A quién no le gustaría?", explican a ED desde su entorno, confirmando que el partido del pasado jueves en la capital hispalense quedará grabado en su retina para siempre.
Un sueño complicadoEl sueño de
Marlos, sin embargo, no se antoja del todo factible, teniendo en cuenta sus 28 años y los números en los que se mueve el
Shakhtar a la hora de vender; unas abultadas cantidades que suelen estar muy por encima de las operaciones que acostumbra a acometer la dirección deportiva del Sevilla.
Alex Teixeira (50 kilos),
Douglas Costa (30) o
Fernandinho (40) son algunos de los ejemplos.