Con Konoplyanka en el zurrón y Mariano a punto de caramelo, el Sevilla ha conseguido cerrar una plantilla con al menos dos jugadores por puesto a falta aún de casi un mes y medio para el cierre del mercado estival de fichajes; un amplio plazo para meditar y para encontrar la manera idónea de poner la guinda a una plantilla de Champions.
Las ´opciones A´ marcadas por el club antes de abrirse la veda ya visten de blanquirrojo; las zonas que más urgía mejorar tienen ya refuerzos; y la llamada ´operación salida´ está también liquidada y no dará dolores de cabeza por primera vez en muchísimos años. Es decir, que Monchi y su equipo de trabajo pueden emprender la búsqueda de esta guinda sin presiones, sin prisas y sin condicionantes. Lo único que podría enturbiar la tranquilidad que hay en el Sánchez Pizjuán por la sensación de trabajo bien hecho son las ofertas que siguen llegando por jugadores importantes como Vitolo o Trémoulinas, entre muchos otros. En este sentido, el club es tajante: no va a negociar por nadie y, o pagan la cláusula, o no saldrá nadie.
Castro, feliz "Tras el lateral no sabemos si vendrá alguien más, porque de aquí al cierre del mercado pueden ocurrir muchas cosas. Este año hemos hecho los deberes bien y rápido para que el equipo esté bien preparado", dijo Castro a los niños, en la clausura del campus ´Football & English´. "Ganar al Barça y hacer buen papel en Champions", las metas.