Con la visita del Barcelona a la vuelta de la esquina, la redacción de este periódico ha podido conocer de primera mano que el deseo azulgrana de recuperar el próximo verano a Denis Suárez, cedido en Nervión hasta 2016, sigue estando patente, no habiéndose desvanecido en los últimos tiempos a pesar de que el gallego haya perdido la titularidad en Nervión y, por tanto, no esté brillando con la elástica blanquirroja tal y como hizo durante el inicio de temporada, convirtiéndose en un fijo para Unai Emery.
La sanción impuesta por la FIFA de no poder fichar hasta enero de 2016 sería, por tanto, la principal motivación azulgrana para intentar repescar al mediocentro; una idea que, como desde el club de Nervión han repetido hasta la saciedad, sería totalmente imposible, a no ser que desde Eduardo Dato se renunciara a la cesión o, en cambio, el Sevilla ejerciera la opción de compra de seis millones que dispone sobre el futbolista; momento en el que el Barça, por tanto, podría llevar a cabo su derecho de recompra, tasada en tres millones más. Posibilidad que a priori se presentaría como la más sencilla, pero que, sin embargo, quedaría totalmente invalidada por la sanción de la FIFA. De ahí que en ´Can Barça´ sigan dándole vueltas a la cabeza en busca de la triquiñuela legal que permita recuperar al joven Denis Suárez, a quien ven con sitio en el Camp Nou, y, a la vez, contentar a un Sevilla que, lógicamente, no quiere dejar de embolsarse los hipotéticos tres kilos que ganaría con la operación por el futbolista cedido.
Así, según aseguran a este periódico desde Barcelona, la intención del conjunto culé es la de comenzar a entablar conversaciones al respecto cuanto antes, sirviendo como excusa el partido de mañana sábado en el Sánchez Pizjuán. La idea no es otra que la ya deslizada en alguna ocasión, ofrecerle a los de Nervión la cesión de Sergi Samper en idénticas condiciones a la de Denis Suárez y, además, compensar económicamente al Sevilla por el acuerdo roto. Con ese ´modus operandi´, los azulgranas esquivarían los tres kilos que a priori tasaban la operación, aunque podrían ser muchas las dudas acerca de cómo esquivar así la sanción de la FIFA sin sacar los pies del plato. En Nervión, como es lógico, no quieren pillarse los dedos.
Aitor Torvisco3 min lectura