Los de Emery encadenaron con el triunfo de anoche siete victorias consecutivas en Nervión. La bombonera se ha convertido desde la llegada del técnico vasco en territorio hostil para los visitantes.
La victoria sobre los leones tuvo ayer un nombre propio, Álvaro Negredo. El vallecano anotó los dos goles que dieron los tres puntos al Sevilla de un partido de locura. El tanto de los bilbaínos fue obra de Gurpegui.