"Conseguir una medalla de plata en el campeonato europeo es una forma ideal de saber que estoy trabajando y entrenando bien". Ésta es la visión global que se trae
Abel Vázquez de vuelta a Sevilla, tras haber cosechado una gran actuación en el
torneo continental, al conseguir la
plata.
El judoka hispalense acabó con un sabor agridulce su paso por
Hungría, ya que, aunque cumplió con los objetivos, "esperaba algo más al llegar a la final". "Estoy muy contento con la medalla de plata, pero podría estar mejor, ya que, cuando te ves ahí, quieres ganar el oro", dijo Abel Vázquez, quien, sin embargo, mejoró sus registros personales del pasado
Campeonato de Europa celebrado en la localidad británica de
Crawley, donde tuvo que conformarse con la tercera plaza y, por tanto, colgarse la medalla de bronce al cuello.
No obstante, la derrota en la final de su modalidad, menos de 81 kilos, entraba dentro de los pronósticos, ya que se medía ante el "rival más difícil actualmente", el ucraniano
Olexandr Kosinov. "Fue un combate muy duro y complicado, contra todo un campeón del mundo y olímpico. Cuando faltaba poco me vi obligado a atacarle, pero me las cogió", comentó el judoka.
Las perspectivas de Abel Vázquez y la selección nacional, a corto plazo, apuntan al Mundial, que aporta puntos a sus participantes para ir a las
Olimpiadas. "El
Europeo es una buena prueba de fuego para los
Juegos de Río 2016, pero aún nos queda el
Mundial, que aporta una puntuación importante para ir a Brasil, donde irán los diez primeros clasificados, por lo que hacer un buen papel en el torneo es fundamental", apostilló Vázquez.
Allí estará, si no hay nada que lo impida,
Vicente Arolas, seleccionador nacional, quien ha trabajado duro con el hispalense en este Europeo, y quien le aportó algunas palabras motivadoras en esa final. "Antes del combate me dijo que disfrutara, el objetivo ya estaba cumplido, por lo que me instó a que aprovechara la situación. Tras la derrota me transmitió tranquilidad, me comentó que no me preocupara y que la próxima vez lo conseguiría", remarcó.
No obstante, el judoka sevillano no estuvo solo en
Eger (Hungría). La expedición española que viajó con él hizo, en líneas generales, "un buen papel". "El resultado de grupo fue bueno, aunque también pudo ser mejor. Estamos inmersos en un proceso de rejuvenecimiento de la selección, por lo que se requiere un aprendizaje mayor", dijo Abel Vázquez, que, aún así, afirmó que "se superaron las perspectivas iniciales" a nivel grupal e individual. "Estamos curtidos en muchas batallas", concluyó.