Está destacando en el centro del campo del San José

Marcos, otro diamante de los Padilla Gallardo

Como ya hiciera antes Kiki (Gerena), el mediano de esta familia tan futbolera empieza a brillar en la hierba; Edu, de momento, opta por el fútbol sala

Marcos, otro diamante de los Padilla Gallardo
Marcos, Kiki y Edu posaron para ESTADIO vistiendo las camisetas que defienden actualmente; los Padilla Gallardo, una hermandad muy futbolera. - A. Federero
Antonio FedereroAntonio Federero6 min lectura
En casa de los Padilla Gallardo se respira fútbol. Puede sonar a frase hecha, pero la realidad se impone en este caso de forma aplastante. Francisco Javier, el menor de tres hermanos, es hoy día uno de los futbolistas más destacados de Tercera. ´Kiki´, como se le conoce en este deporte, brilla con el Gerena después de hacerlo con el San José, donde ahora juega el mediano.


Marcos, su antecesor en esta hermandad, se está erigiendo como uno de los ´culpables´ del buen hacer cañamero. "Somos líderes, y nos lo merecemos. Hay mucha juventud, muchas ganas e ímpetu.

Lo damos todo en cada entrenamiento, y tanto Maldonado como Manolo Sánchez aportan cosas interesantes: uno da experiencia, nos trata como un jugador más, se siente futbolista; otro tiene otra visión, nos pone ejercicios nuevos", comenta el futbolista sobre su equipo y sus técnicos, a la vez que no puede esconder su ambición: "Desde el principio nuestra meta era estar arriba y ascender, y ahora, viendo la posición en la que estamos, nos lo estamos creyendo más. De todos modos, nuestros técnicos son como Simeone, y dicen que no se gana con el escudo, sino echando ganas".


Marcos, con 22 años recién cumplidos, ha vuelto al San José. Más bien al fútbol 11, puesto que antes de jugar en el Felipe del Valle lo hacía en el Pabellón Fernando Martín.
Hasta el curso pasado, el San José Fútbol Sala era su equipo y el parqué su escenario. Ahí llegó después de dejar por una lesión la Agrupación Deportiva San José, donde estuvo hasta juveniles. Una vez recuperado el fútbol sala llamó a su puerta y no se lo pensó. Con un balón, porterías y terreno de juego más pequeños, y junto a Edu, su hermano mayor, destacó mucho, tanto, como para que el San José pensara en repescarlo para el césped. Fue la temporada pasada, aunque finalmente no convenció a Juan Carlos Garzón, entonces entrenador azulino.


"Garzón no contaba conmigo, pero cuando lo echaron, Maldonado, que era su segundo y ya me conocía, me llamó en noviembre", comenta el futbolista, que tuvo que declinar el ofrecimiento: "Ya me había comprometido con el equipo de fútbol sala, no podía dejarlo tirado a mitad de temporada".


Por eso, con la campaña ya terminada, Marcos cambió de nuevo de balón y pasó otra vez al fútbol 11: "Me llamó el Betis de fútbol sala, pero ya le había dado mi palabra al San José, y aquí estoy, de lo que no me arrepiento". Y es el conjunto cañamero el que, sin duda, ha salido ganando, ya que el mediocentro acumula dos goles y se está erigiendo como uno de los motores del líder de Primera Andaluza.


"El fútbol y el fútbol sala se diferencian, sobre todo, en la afición. Aunque parezca al revés, pero en fútbol la gente está más encima y anima más", finaliza.


Kiki, el menor de los hermanos: "A Marcos lo veo jugando en Tercera; tiene mucha calidad"
Curiosamente, el primero de los Padilla Gallardo en destacar en el balompié provincial fue el menor de los tres hermanos. Kiki, a punto de cumplir 21 años y producto de la prolífica cantera del San José, regaló a la afición del Felipe del Valle mañanas de buen fútbol. Y José Juan Romero, siempre pendiente de jugadores con calidad y proyección, lo reclutó para el Gerena, donde se ha convertido en pieza clave dentro de sus novedosas ideas futbolísticas.  

"Kiki es un espectáculo, merece la pena verle jugar", dice de él Marcos, otro enamorado del fútbol vistoso del equipo minero. "Tienen razón cuando dicen que es el mejor equipo que hay en Tercera".

El halago, como no podía ser de otra forma, también va en dirección opuesta. "Marcos tiene muchísima calidad, y aunque venga del fútbol sala, se está adaptanto muy bien", comenta Kiki de su hermano, a la vez que puntualiza: "Creo que la Primera Andaluza se le queda pequeña, así que lo veo en Tercera el año que viene".

Como nota curiosa, ambos hermanos se enfrentaron el pasado verano, en un triangular en La Algaba, acabando 0-0.


Edu, el mayor, sigue jugando en el parqué y se recupera de una grave lesión
Edu, el mayor de los tres hermanos, no ha seguido los pasos de Marcos y sigue jugando al fútbol sala. Lo hace con el San José FS en Segunda Andaluza, aunque ahora, por desgracia, está parado debido a una grave lesión de rodilla.

Fue en el pasado mes de marzo cuando Edu se rompía los ligamentos cruzados, teniendo por ello que pasar por el quirófano. Fue en Córdoba, cuatro meses después, cuando era intervenido, así que ahora anda recuperándose para ponerse cuanto antes otra vez a las órdenes de José Aspas. Con 27 años, Edu Padilla tiene todavía mucho fútbol en sus botas para demostrar.