A pesar de que los fondos que pueda destinar a la adquisición del central polivalente que cerraría la plantilla están supeditados a lo que resta de la 'operación salida', en el
Betis confían aún en traer a ese zaguero que convierta el plantel en mucho más competitivo. Por ello,
Miguel Torrecilla mantiene vivas varias operaciones a la espera de definir los parámetros finales en el apartado económico, dejando escapar, no obstante, algunas que exigían más celeridad (
Gastón Silva, por ejemplo).
Una de las vías que más gusta es la que representa Marcel Tisserand, un prometedor futbolista que, como el también tanteado en su día
Valère Germain, no tiene sitio en el todopoderoso
Mónaco. Nacido en la localidad francesa de Meaux y criado en la cantera del club del Principado, se ha estrenado ya como internacional absoluto con la República Democrática del Congo, una doble nacionalidad que, bien por su origen europeo o bien por el Tratado de Cotonou, propiciaría que no ocupase plaza extracomunitaria en Heliópolis. De 23 años y 1,84, Tisserand cuenta con contrato hasta 2019 con los monegascos, que tasan su traspaso en cinco millones de euros, amén de exigir la inclusión de una serie de cláusulas que dificultan sobremanera el aterrizaje del susodicho en
Sevilla: pluses por rendimiento y la reserva de un 20% de un hipotético traspaso en el futuro.
Así las cosas, este central elegante y con salida de balón ha jugado en muchas ocasiones ya durante su carrera como lateral (principalmente diestro, pero también zurdo), amén de como interior. Según confirmaron a
ESTADIO Deportivo desde su entorno, el
Betis se habría sumado al Espanyol entre sus pretendientes de
LaLiga, si bien ambos prefieren una cesión, acaso incentivada.